“¿Cómo puedo mantener mi confianza, durante este cambio de gobierno? Yo no voté por ese candidato”.
Mi especialidad, no es la parte técnica del dinero. Es algo más profundo; mi fuerte es la energía (emociones y pensamientos) sobre el dinero. Para tu tranquilidad, me respalda el reconocido economista Adam Smith, quien dijo: “Todo en el dinero, se trata de creencias”.
En etapas cíciclas, como este cambio de gobierno, hay algunas trabas que entorpecen nuestra confianza monetaria. Afortunadamente, la consciencia es el 80% de la solución. Aquí los cinco obstáculos que observo con mayor frecuencia, en mi práctica privada de coaching con empresarios en México.
Te invito a que hagamos una auditoria de tus creencias monetarias, para asegurar que puedes sortear esos escollos con agilidad.
Obstáculo uno. Confundes tu área de influencia.
El gobierno, el tipo cambiario, o las políticas de tu industria son circunstancias de mercado. Esas son las aguas, pero tu eres el surfista. Eso no ha cambiado al sexenio anterior. ¿Porqué ahora la sorpresa?.
Practica la responsablidad, que no es otra cosa que nuestra habilidad para responder. Nosotros somos los juiciosos de nuestro dinero. Nunca fue el gobierno. Las condiciones son ajenas a nosotros, no tenemos control. Pero sí tenemos autonomía de nuestra forma de reaccionar.
Buenas noticias: la responsabilidad de mi confianza financiera nunca fue del gobierno.
Obstáculo dos. Olvidas cultivar la confianza en ti.
La confianza es un músculo; empieza a fortalecerse con una práctica individual: confiar en nosotros mismos. En nuestra capacidad de generar recursos. No nada más dinero, sino oportunidades, tiempo, energia. Esa capaciad siempre es de nosotros. Por favor no creas que vivo en una burbuja rosa, pero el estar con un temor, o generar una postura falsa de víctimas, no contribuye a genera confianza.
Es cierto, vivimos en un mundo de fuerzas macroeconómicas que no controlamos. Lo que sí dominamos es la energía que lanzamos al mundo. Así que yo te pido encarecidamente: seamos responsables de lo que aventamos en deseo al mundo. Cuando tienes un pensamiento, activas una posibilidad. Es tu oportunidad para propiciar solo las posiblidades que quieres ver en tu vida.
Otra práctica que genera confianza inmediata es cumplir tu palabra. Saber que, como dirían los gringos: You have your own back.
Obstáculo tres. Evitas escuchar a tu dinero.
Quiero que estés en comunicación con tu dinero. Acércate a tus estados financieros, ten clara la diferencia entre solvencia y liquidez. Revisa cual es el costo de tu negocio. Si hay cambios requeridos, ajústalos sin tardanza. Eso también puede depender de ti. En la medida en que estés cerca de los números en tu negocio y de la operación puedes mantener la mente en calma. ¿Sabes hoy cómo llega o hacia donde se está yendo tu dinero? ¿Está eso alineado con la visión de tu negocio y tus valores rectores de vida?
Me encantan los números, por imparciales y honestos.
Cuando hay una emoción incómoda al ver un reporte financiero, lo que duele no es el número, es la historia que te cuentas. Las emociones, como los análisis monetarios, son información. Datos, que invitan a la acción.
Obstáculo cuatro. Te distraes con temas pendientes.
Todos aquellos trámites sin concluir, especialmente de temas legales o fiscales, consumen mucho de tu ancho de banda mental y emocional. En momentos comoeste, requieres disponibilidad de tu capacidad creativa; generar estrategias que cultiven la permanencia de tu negocio es imperativo.
Programa tu agenda para concluir esas diligencias. Hazlo celeridad.
Es excelente idea armar equipos especiales de acción para todas aquellas tareas que se quedaron a la mitad. Advertencia: hay una delgada línea entre liberar energía creativa, y embarcarte solo en estar ocupado.
¿Cómo destacar la diferencia? Es simple: con frecuencia la acción que hará avanzar más a tu negocio, tiende a evitarse con mayor resistencia.
Obstáculo cinco. Acotas tus fuentes de riqueza monentaria.
Recuerda que el dinero es como el agua: puede llegar a llenar tu alberca desde muchas formas. Mangueras, pipas, cubetas, lluvia. No lo limites a una sola fuente de ingreso: un contrato, un cliente. Tu riqueza es esa alberca. Solo que hoy hemos decidido que se llena solo a través de una manguera que por cierto, a lo mejor alguien la puede estar apretando.
Vamos a descubrir otras formas con lo que ya tienes, desde lo que ya eres y con lo que ya sabes, de generar lo que yo denomino Divino Dinero. Procura no depender de una sola fuente de generación de riqueza. Eso ademas de darte autonomia, te libera de la falsa postura de víctima falsa, para colocarte en la disposición creative.
Me cae bien Adam Smith. En especial cuando nos recuerda que: “La real tragedia de los pobres, radica en la pobreza de sus aspiraciones”.
